Han pasado varias semanas desde que escribí el último post, siete
semanas creo en que fue necesario por primera vez, poner en pausa, junto con
otras cosas, una de las actividades que más amo y disfruto en la vida,
para poder redefinir prioridades, reorganizar agendas, reestructurar
planes y recursos y reiniciar y ejecutar viejas y nuevas acciones que
están agregando nuevos sentidos y valiosas contribuciones a la vida de
un servidor… y una de esas se ha dado desde el parque…
Son
ya unas semanas desde que empece a correr con mi mascota en el parque publico inluso irme un poco mas extremo y recorrer el bosque.
El
cambio fue notorio; no solo en la cantidad de esfuerzo adicional que se
requiere para pisar un suelo suelto y resbaloso cuando está seco,
compactado y pegajoso cuando está mojado y abultado en algunos lugares y
cóncavo en otros, pero también en la cantidad de aprendizajes,
analogías y conclusiones a las que uno puede llegar con tan solo
observar con un poco de detenimiento lo que sucede a su alrededor.
A
los cinco minutos de haber empezado esta travesia, he de reconocer que ya estaba sacando los higados y suplicando llegar al carro tomar agua y regresar a mi cama, pero mi perro me ha motivado a seguir adelante y veo como lo disfruta, claro dspues de estar casi toda su vida dentro de la casa, eso me hace pensar que esta experiencia se asemeja a la vida común y corriente de
todos:
- En
el parque es fácil ver quiénes están trabajando por un objetivo claro y
específico y quiénes están ahí por falta de un mejor lugar donde
estar. Resulta sencillo identificar a quienes están entrenando y
trabajando en mejorar su desempeño; corren, con cronómetro en mano, de
un punto específico a otro determinado. También puedes señalar a quienes
con un paso constante e intervalos de mayor desempeño, vamos a procurar
nuestra salud pero no a competir.
Y por supuesto también puedes ver de bote pronto a quienes tan solo van a pretender que están ahí, ataviados con las mejores prendas deportivas que usan para desfilar durante una vuelta para después, sentados en una cómoda banca, fumar un cigarro y tomar un café… Ahora entiendo el dicho “as easy as a walk in the park”. - Tanto como en la vida, al ejercitarte en el parque también resulta fácil caer en la tentación de seguir el paso que otros están marcando. Es común ver como una persona joven que va caminando, se siente presionado a correr porque acaba de ser rebasado por alguien de mayor edad que va corriendo a mayor velocidad. O como personas que no se conocen compiten entre sí apretando el paso para ir tan solo unos centímetros adelante del otro. Todos olvidando que están ahí por ellos mismos, por su propia carrera; dejando de lado que la única marca que tienen que romper es la propia. Por eso, siempre resulta alentador y refrescante ver a los pocos que no solo se enfocan en mantener su propio paso, sino que también definen la dirección en que quieren avanzar, en lugar de tomar la ruta y el sentido que la mayoría recorre ahí.
- Tener el equipo y las herramientas correctas hace toda la diferencia para lograr un mejor desempeño y ser mucho más eficientes al lograrlo. Jamás hubiera dedicado más de 5 minutos de pensamiento a la importancia de usar los zapatos tenis correctos, no solo para lograr mejores resultados, pero para no lastimarme al hacerlo. Pero tanto como en la vida y en el trabajo, aquí también necesitamos contar con el equipo correcto y los recursos adecuados para lograr un mejor resultado.
- Sin
embargo no hay que echar la casa por la ventana… seguro que tener el
mejor equipo posible es lo más deseable, pero tampoco se trata de
invertir todos nuestros recursos en estas herramientas a menos de que en
verdad estemos seguros de que las usaremos y aprovecharemos al
100%. Una vez emocionados cuando comenzamos a desempeñar una nueva
actividad, es fácil ceder ante la tentación de tener no solo todas las
herramientas y equipo indispensable, pero también de hacernos de todos
los juguetes y parafernalia alrededor de esta. Relojes, podómetros,
tenis, MP3s, pants o tights, cambian su nombre por Polar, Nike + Ipod
Sport kit y Adidas o Nike.
Y si bien es increíble contar con todos estos recursos, sin duda no son indispensables para lograr la tarea.
Crecer poco a poco e ir haciéndose de mejores recursos y herramientas conforme vamos logrando un avance real, resulta no solo más costo - eficiente pero también se convierte en un gran incentivo. - Todos
necesitamos un coach. Todos los días alguien nuevo llega al parque para
comenzar su nueva buena rutina, pero muy pocos comienzan con el apoyo
de alguien que les ayude a trazar un buen plan para esta.
Algunos consiguen un mentor que les dice como obtuvo sus logros, más su historia difícilmente será la suya. Otros se acercan con un consultor que les dice que ejercicios (que nunca han hecho) la teoría dice que se deben hacer; y otros, la gran mayoría, llegamos solos a la pista, nos estiramos como creemos que es mejor, calentamos como suponemos que se debe hacer y nos lanzamos a la pista al ritmo y paso que asumimos es mejor, pero no nos aseguramos de contar con alguien que nos ayude a establecer un plan, definir objetivos concretos, identificar los mejore ejercicios, medir nuestro avance y retarnos a lograr más, mucho más de lo que nos creemos capaces. Y entonces es cuando confirmo que todos necesitamos un coach.